Rodeados por el impresionante paisaje del desierto, los estudiantes de I Medio compartieron una aventura increíble en el marco de su viaje de estudio a San Pedro de Atacama en el Norte de Chile, que, sin duda, dejó una marca duradera en su proceso educativo.
Mediante una gran variedad de actividades, como trekking, cicletadas, talleres, entre otras, las alumnas y alumnos conocieron e interactuaron con la cultura y naturaleza propia de cada lugar que visitaron, generando de esta manera experiencias únicas de aprendizaje que les brindaron instancias de conocimiento personal y trabajo en equipo.
Sobre todo las dinámicas grupales son un componente fundamental de los viajes, ya que fomentan el compañerismo, la colaboración y la comunicación entre los estudiantes, generando un entorno propicio para el aprendizaje y el crecimiento personal. Aprenden a escuchar y respetar las opiniones de los demás, a compartir ideas, a resolver problemas de manera conjunta y a tomar decisiones en grupo.
Es gracias a estas importantes vivencias en comunidad, que logramos fomentar la sana convivencia y la cohesión de los cursos, que durante su viaje de estudio se conocieron más, se ayudaron unos a otros, y disfrutaron con las anécdotas de los demás.
